24 de noviembre

Salud

Producción
Desarrollo social

Fein supervisó la planta de KyB Catering, responsable de producir viandas para espacios municipales

La empresa trabaja hace casi dos décadas proveyendo alimentos de calidad y alto valor nutricional en distintas instituciones y organizaciones del Estado local.

Este martes por la mañana, la intendenta Mónica Fein visitó una de las instalaciones productivas de KyB Catering (ubicada en Rio de Janeiro 1401), la empresa que hace casi 20 años trabaja de forma conjunta con el municipio para abastecer de alimentos listos para el consumo a hospitales, Centros de Convivencia Barrial, refugios de invierno y colonias de vacaciones de verano, entre otros. La recorrida se realizó en el marco de un seguimiento de calidad que la Municipalidad realiza sobre las viandas en términos de calidad y aporte nutricional.

A diario KyB produce, a través de sus dos plantas, unas 2500 viandas de mediodía y noche para distintos espacios municipales, a la vez que provee meriendas y colaciones para todos los CCB. “Lo que es la parte de elaboración se hace en una planta que tenemos en Funes. Acá se realizan algunas cocciones pero viene todo terminado para hacer el fraccionado”, contó Julio César Iglesias, dueño y responsable de la empresa.

“Hace casi 19 años esta empresa ganó una licitación de la cocina centralizada y hoy es un ejemplo de tecnología, de desarrollo. Ha incorporado nuevas prácticas de seguridad alimentarias y la verdad que estamos muy orgullosos de haber sido parte de esto desde el inicio”, aseguró la intendenta Mónica Fein, que fue además la encargada de firmar el primer contrato con KyB Catering cuando se desempeñaba como secretaria de Salud Pública.

De la recorrida también participó personal especializado de las secretarías de Salud Pública y Desarrollo Social (a través de la Dirección de Infancias y Familias), que desde 2016 vienen realizando tareas periódicas de seguimiento de calidad, buscando así perfeccionar el servicio y satisfacer a quienes los consumen.

De esta forma, se supervisa no sólo que la producción cumpla con los estándares establecidos por pliego licitatorio, sino que la recepción de las viandas sea positiva: se dialoga con niños, niñas y adultos que a diario reciben las viandas para tomar en cuenta sus opiniones y sugerencias, con el objetivo de introducir variantes a las propuestas de menúes, además de controlar y mejorar de calidad nutricional.

“También están las nutricionistas que trabajan en cada uno de los hospitales y reciben la mercadería que uno les está enviando. Las viandas reciben supervisión directa todos los días, los 365 días del año”, afirmó Iglesias, que busca profundizar las buenas prácticas productivas. “La idea es ir avanzando y mejorar, incorporar tecnología para bajar los riesgos alimentarios”, indicó, poniendo como ejemplo la inclusión de atmósfera modificada en el armado de bandejas.