De Burucuyá a La Tierrita: vecinos festejaron el cambio de nombre del Centro de Convivencia Barrial

El Centro de Convivencia Barrial La Tierrita (ex Burucuyá) presentó públicamente su nuevo nombre en la tarde del viernes 21 de octubre, con una jornada a puro juego, baile y acrobacias. El cambio de nombre apunta a fortalecer el vínculo de la institución con los vecinos y vecinas del barrio, que aún después de años del cierre del Club La Tierrita seguían nombrando el lugar de igual forma.

Del festejo participaron niños, niñas, jóvenes y adultos que concurren diariamente para sumarse a las actividades del centro, acompañados por familiares y vecinos.

Los más pequeños pudieron disfrutar de juegos como el jenga, el sapo, juegos cooperativos, así como de maquillaje artístico. Los más grandes pusieron el cuerpo en movimiento al bailar al compás de diversos ritmos folclóricos, y al cerrar la jornada, chicos y grandes se sentaron para asombrarse y reír con el espectáculo circense a cargo de la compañía Circo Lumière.

En la ocasión, Florencia Gómez, coordinadora del Centro de Convivencia Barrial La Tierrita, hizo referencia a las motivaciones que llevaron al cambio de nombre, relatando cómo los vecinos seguían sosteniendo una fuerte apropiación del nombre del club que anteriormente funcionó en el mismo lugar.

Según refiere la coordinadora, los vecinos en general seguían haciendo referencia al lugar como La Tierrita, e incluso quienes no reconocían la dirección –o el pasaje Burucuyá-, lo identificaban cuando se lo llamaba con su antiguo nombre. “Hasta la folletería con la cual, como Centro de Convivencia Barrial Burucuyá, convocábamos a actividades decía entre paréntesis ex Tierrita”, comentó Florencia, quien agregó: No hay valor más fuerte que el de recuperar la identidad del barrio”.

Por su parte, Mónica Peralta, subsecretaria de Desarrollo Social, hizo referencia al marco general en que se encuadran las actividades del centro. “Todo forma parte de las políticas que llevamos adelante desde la Secretaría de Desarrollo Social, propiciando la participación ciudadana, generando más convivencia, promoviendo los derechos de vecinos y vecinas y favoreciendo el acceso a las distintas políticas públicas que el estado municipal desarrolla, en este caso, en el Distrito Noroeste de la ciudad”, comentó.

Con respecto a la jornada, Peralta hizo referencia a la importancia de compartir un encuentro festivo con quienes se acercaron para celebrar el cambio de nombre del Centro de Convivencia Barrial, rescatando “un nombre que se identifica con las tradiciones del barrio”.

La voz de los vecinos

Dalila Lobos participa actualmente del curso de capacitación en Jardinería básica que se desarrolla en el centro, en el marco del Programa Nueva Oportunidad. Se acercó al centro cuando empezó a llevar a sus dos hijos menores a participar de las propuestas socieducativas.

Con relación a la participación de niños y jóvenes, comentó: "Ellos vienen, juegan a la pelota, aprenden fotografía y hacen algunas actividades más”, y destacó: "Lo bueno es que están acá en lugar de estar en la calle”.

Por otro lado, Dalila comentó que desde el centro le propusieron participar del curso de jardinería, al cual hoy asiste con interés. "Es una experiencia linda, porque aprendés, hacés amistades y siempre compartís cosas nuevas”, comentó.

Otra vecina del barrio, Laura Kelle, se acercó al Centro de Convivencia Barrial cuando su hijo menor tenía dos años y necesitaba un espacio al que pudiera concurrir mientras ella trabajaba. Al finalizar esa etapa, siguió concurriendo para participar de fútbol y aprender ajedrez, entre otras actividades. Luego, su hijo mayor, que actualmente tiene 12 años, también empezó a concurrir también al centro.

“Siempre venimos en familia y participamos de las actividades que organizan”, comenta Laura, y recuerda que cuando era chica, en la época en que cursaba primer grado de la primaria, iba a aprender folclore en el entonces Club La Tierrita. “Me acuerdo cuando se armaban los bailes, se juntaba mucha gente, había música, siempre veníamos”, y agrega: “Es como que el lugar renace”.