Barrio La Cerámica: jóvenes transformaron un minibasural en nuevo espacio de recreación

A partir de una propuesta surgida desde la mesa de gestión barrial que integra a vecinos y representantes del Ejecutivo municipal, un grupo de jóvenes de La Cerámica aceptó el desafío de aportar su tiempo para reconvertir un minibasural situado en la esquina de Irigoyen y Cosquín en un nuevo espacio de recreación para toda la comunidad del sector. El trabajo en conjunto con el municipio incluyó la limpieza total del predio, la colocación de juegos para niños y de bancos de cemento, además de la forestación del lugar. 

Todo comenzó hace sólo un mes, cuando jóvenes del barrio que se juntaban a pasar el rato en dicho entorno periódicamente plagado de residuos recibieron la propuesta de sumarse a la tarea de limpiar y acondicionar el predio y así poder contar con un mejor espacio de encuentro. "Yo iba a seguir de largo como siempre, pero luego retrocedí en mis pasos y me animé a hacerles la pregunta: ¿a ustedes les gustaría tener un espacio más lindo para juntarse?, y en seguida les sugerí acercarse al CIC (Centro Integrador Comunitario) de Molina e Irak para ver las alternativas”, contó Roxana Ortigoza, vecina referente del barrio.

A partir de ello, el municipio llevó adelante una intervención que comprendió el retiro de escombros y la limpieza total del predio, plantación de árboles, colocación de juegos para los más pequeños (tobogán, tres hamacas y trepador), bancos de cemento, pretiles para mayor protección y un gran cartel de chapa que advierte a los transeúntes la prohibición de tirar basura. Por su parte, los jóvenes fueron los encargados de blanquear las paredes, donde luego pintaron un mural con un gran puente en el sector central. 

Según cuenta uno de los chicos que participó en el proceso de recuperación del predio, la idea del puente en el mural surgió del poema de Elsa Borneman, Yo dibujo puentes para que me encuentres. “La poesía es toda una metáfora de lo que nos sucedió. Creo que nosotros, los adultos, muchas veces subestimamos la fuerza y el coraje de jóvenes que quieren salir de donde están, sólo necesitan una mano, y atención”, resaltó Ortigoza.

En el mismo sentido, Valeria Pena, coordinadora del CIC Cerámica, valoró la propuesta : “Estamos felices de que los chicos se hayan acercado; algunos ya habían participado del proyecto Nueva Oportunidad, pero otros no habían pasado por la institución. Esto representa los vínculos por los que trabajamos día a día, no es algo casual, sino el fruto de un trabajo diario de todos vecinos, referentes barriales y nuestros equipos de la gestión territoriales”, indicó.

“Nosotros estamos contentos porque este es un lugar que lo sentimos nuestro, por eso está bueno tenerlo así de lindo”, aseguró Seba, mientras trabajaba para plantar un Ceibo en el lugar. El mismo joven documentó todo el proceso de cambio del espacio con la cámara de su teléfono celular, luego subió las fotos a su Facebook personal junto al siguiente comentario “…De a poquito entre todos se logró lo que queríamos... gracias a todos los vecinos que pusieron su granito de arena. Y gracias al Centro integrador comunitario” (sic).

Algunos de los jóvenes que colaboraron en la transformación del espacio público, participaron el año pasado de los cursos de electricidad brindados por el municipio mediante el programa de inclusión sociolaboral Nueva Oportunidad, y hoy muchos de ellos ya trabajan en el oficio. Otros también se forman en técnicas de canotaje y natación en el marco del proyecto socioeducativo municipal Barrios de Cara al Rio.

Un barrio que se transforma con la intervención del Estado

La Cerámica es uno de los barrios de la zona Norte en el que la Municipalidad, el gobierno provincial y el gobierno nacional trabajan de manera conjunta con intervenciones integrales en un tramo de 50 cuadras, comprendiendo la realización de nuevas veredas, pavimentación con cordón cuneta, alumbrado público y equipamiento comunitario con una inversión de $ 66.631.813 a través de Programa de Mejoramiento de Barrios (Promeba) y la incorporación de 1.158 vecinos al sistema de red cloacal.

Además se llevó a cabo una significativa transformación en el corazón del barrio con la esperada apertura de calle Cafucurá desde Molina a avenida De Los Granaderos y la inminente inauguración del nuevo Centro de Salud Provincial Nº 19 Cerámica, en calle Irak y Molina.

Otros espacios recuperados del distrito Norte

También otros lugares del distrito Norte fueron recuperados y transformados con propuestas similares durante estos ultimos meses. En Unión y Blas Parera (barrio Unión y Parque Casas), se recupera un ex basural a pedido de vecinos del barrio, con colocación de bancos Z, cestos, nuevas columnas de iluminación y jornada de plantación de árboles con la escuela del barrio.

En tanto, en calle Polledo al 4000, jóvenes transformaron el corredor verde de las vías, un ámbito de 6.250 metros cuadrados, en una huerta dedicada al cultivo de verduras, plantas medicinales y hortalizas ecológicas.

En Camino de los Granaderos y Baigorria, lo que supo ser un minibasural crónico, se reconvirtió en nuevo espacio de recreación donde se colocaron mesas, bancos y pretiles, árboles y se realizó la pintura de un mural alusivo, a cargo de jóvenes y niños del club El Torito.