Proyecto Di Verso: mujeres y percusión en el distrito Sur

En el marco de las propuestas culturales de la Municipalidad que se desarrollan en el ámbito del distrito Sur sigue abierta la inscripción para participar de manera gratuita del espacio de percusión que funciona todos los viernes de 14 a 15.30  en el Polideportivo 9 de Julio, de Dorrego 3339.  Quienes deseen anotarse, deberán llamar al 4809890 Interno 480/481. La propuesta está a cargo de Ana Lola Vélez y Julia Dayub, docentes del Proyecto Di Verso.

Proyecto Di Verso nació de la necesidad de tener un espacio donde participen mujeres dentro del territorio del distrito Sur. Involucra la transversalización de la perspectiva de género y la música como dispositivo habilitante de las identidades colectivas y el empoderamiento en contextos adversos.

En muchas culturas, si bien se lo considera patrimonio, el acceso a instrumentos de percusión está negado a las mujeres, incluso, en la actualidad. Ante esta realidad, las creadoras de este espacio hacen un revisionismo histórico y se preguntan qué genera el tambor para que todavía muchas mujeres no puedan contar con esa herramienta de expresión: “Hay algo en la relación de la sincronización del sonido y el útero. Ese ritual, esa vibración es muy fuerte. Cuando tocamos juntas, excede la palabra. Se canalizan y dicen más cosas. Hay veces que tenemos que sanar y no es suficiente decir. La percusión permite sacar afuera, crear, unirnos y escucharnos dentro de un territorio y un marco de identidad colectiva”, detalló Ana.

La iniciativa habla también de un lugar donde poder contar lo que pasa no sólo desde lo individual sino también a nivel colectivo a través de la música: “Sucede que cuando se canta, aparece un volumen alto. La palabra hablada no es lo mismo que la cantada. Esto sumado a la sincronización de tambores lo hacen una experiencia única”, describe Julia.

Proyecto Di Verso emerge desde la zona sur para proyectarse a toda la ciudad. Se escuchan desde allí los sonidos y las voces que hablan de lo cotidiano pero también rompen las estructuras de aquello conocido. La conexión entre mujeres y tambores inaugura otras formas de hacer que exceden lo que se pueda narrar. Es otro lenguaje que está disponible para encontrarse, cada vez que suene un tambor.